El organillo
A Manú Balero.
Perdiendo rumbos en la atardecida
serenidad del día complaciente,
guie mis pasos por entre la gente
que corría su prisa por Florida.
A una corta distancia, sustraída
del andar presuroso del torrente
una rueda observaba, atentamente,
la estampa de un antaño florecida.
En medio del asombro circundante
desgranaba su canto un organillo;
lucía su destreza una cotorra;
y repartía un ángel trashumante
mil dichas en la faz de un papelillo
y honores, en la comba de su gorra.
Nota del Revisor: Manú Balero (1929 – 1998) fue un simpático organillero que apareció durante la década de 1990 en la calle Florida, trayendo los ecos de una Buenos Aires antigua y ya casi olvidada. Estas cosas bellas y olvidadas, de un pasado que no vuelve, tocaban profundamente la fibra sensible de mi padre. Este fue el resultado.