La partida

Padre: — ¿por qué este frío me estremece?
Abrígame al calor de tu ternura
y ayúdame a librar de esta opresura
que todos mis sentidos desvanece.

Esa luz cenital que me enceguece
y que vela a mis ojos tu figura,
me inhibe de acudir en derechura
hacia el abrazo que tu amor me ofrece.

Yo sé que estás aquí, de mí cuidando,
mas no acierto en mi búsqueda a encontrarte
por más que pongo mi razón alerta.

Tengo mis dudas de si estoy soñando,
y me asalta el dolor de acongojarte
porque hasta puede, padre, que esté muerta.

Noviembre de 1981


Notas del Revisor:

  1. La muerte de Hebe. Terrible. Y no puedo evitar el paralelismo con Erlkönig, que a pesar de sus lecturas dudo que mi padre conociera o recordara al momento de componer este soneto.
  2. Una versión original, intitulada El adiós dice en el 2º verso “Cobíjame al calor de tu ternura”.
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