Soneto gris

Monocromo del gris. Gris sin relieve
el de esta tarde borrascosa y triste,
porque si mucho es cuanto afuera llueve
tanta o más inclemencia al alma asiste.

Sin la fuerza de un ala que la eleve
su derrotada languidez desviste,
y se funde en el gris frío y aleve
perdida la conciencia de que existe.

Gris es la débil luz que me circunda,
y gris es el silencio que me inunda
el corazón de grave desamparo.

Gris el ritmo del tiempo indiferente
y, como broche de este día avaro,
hasta es gris el amor, que hoy está ausente.


Nota del Revisor: encontrado también en manuscrito en borrador con diferencia en el 9º verso: “Gris es la luz que escasa me circunda”.

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